Venía haciendo un buen trabajo con un auto que se puso en pista muy cerca de la fecha y que respondió con un excelente funcionamiento desde los entrenamientos del sábado. Fabián Battilana demostró en la primera fecha del año de la Clase A del Procar4000 que tenía el potencial para pelear y terminar entre los cinco primeros de la final en el Circuito 7 del Gálvez pero una mancha de aceite lo complicó en la salida del sector de la horquilla y recibió un fuerte golpe en la parte trasera de parte del auto de Guillermo Ferrón.
En ese momento la carrera se paró con “pace-car” y por suerte los pilotos no sufrieron graves consecuencias físicas pero los autos quedaron muy dañados y la Chevy de Battilana terminó con la cola casi en su totalidad desaparecida terminando de esa manera el fin de semana de competencia.
Una lástima lo que le pasó al piloto de Castelar porque venía para ver la bandera a cuadros entre los de punta y ahora deberá esperar hasta la segunda fecha para tomarse revancha con un auto que hasta que se confirmó la cuarentena por el Coronavirus, estaba en plena reconstrucción para ponerlo en pista y dejarlo en óptimas condiciones pero tanto el piloto como el equipo deberán esperar unos días más para culminar con los trabajos.
“El balance de la primera carrera del año es muy positivo. El auto lo terminamos el jueves antes del fin de semana. Pudimos probar el viernes y los tiempos fueron buenos hasta Nacho Savino pudo girar a quien le agradezco la mano que nos da siempre. El sábado en el primer entrenamiento el auto me sorprendió porque salimos, dimos dos vueltas y quedamos entre los punteros hasta que metimos una vuelta rápida y quedamos primeros en esa tanda y en la general. En lo personal fue una alegría enorme y realmente me sorprendió porque pensé que iba andar bien pero nunca que iba a estar primero”, analizó Fabián.
“En clasificación tuvimos mala suerte por distintas circunstancias hasta que apareció la bandera roja. Fue complicada. En la serie largamos quintos y terminamos terceros mientras que en la final en la salida de la horquilla cuando venía cuarto salgo acelerando y el auto me patinó, para mi agarré un poco de aceite porque se giró muy fácil. Quedé mal parado y con la mala fortuna que me pegó Ferrón en la parte de la cola. Si bien la Chevy se rompió bastante fue todo chaperio, no se dobló la estructura. Lo principal fue que no sufrí ningún golpe grave en lo físico”, agregó.
“Agradecido a Mariano D´addezio que me hace el motor, a Marcelo Rodrígues, a todos los chicos del equipo que me hacen el chasis y va espectacular, a mis amigos y a mi familia que siempre me dan una mano. En las últimas semanas el equipo venía trabajando a pleno en el auto para recuperarlo lo más rápido que pudo y ahora quedó parado por el Coronavirus. Habrá que esperar e ir con todas las ganas a la próxima fecha para conseguir un buen resultado final”, cerró Battilana.
Tweets por el @Procar_4000.